INTRODUCCIÓN
Se jugaba una nueva versión del clásico universitario a la cual ambos
elencos llegaban con sorpresas en sus alineaciones. Universidad de Chile jugaba su clásico 1 – 4 – 2 – 1 – 3 con Paulo
Magalhaes y Gustavo Lorenzetti desde el arranque. Universidad Católica por su
parte, jugaba un 1 – 4 – 2 – 1 – 3 con Micheal Ríos como principal novedad en
el sector medio ofensivo y el joven lateral Juan Pablo Gómez en reemplazo del
suspendido Cristián Álvarez.
FACTORES DURANTE EL PARTIDO
Universidad Católica pierde este partido debido a
la perdida de balones en mediocampo y de sus jugadores en campo propio. La UC se mostró débil a la hora de mover el balón
y alimentar a sus delanteros. Esto facilitó la tarea a Rojas y Corujo de
ampliar el número de jugadores volcados en ofensiva, presionar en terreno rival
y finalmente quedarse con el encuentro.
PÉRDIDA DE POSESIÓN Y FALTA DE CONCENTRACIÓN EN
CATÓLICA
Universidad Católica intentó, durante los primeros 15 minutos del
encuentro, posicionarse en terreno rival y presionar la salida de Universidad
de Chile. Sin embargo, pronto se encontrarían con un factor que no les
permitiría sentirse cómodos durante todo lo que restaría del cotejo; la perdida
fácil de balones.
José Luis Muñoz intentaría progresar por el sector medio, pero Cristián
Suárez se muestra ágil para interceptar dicha jugada. El balón lo toma
Lorenzetti, este entrega un pase que intercepta Pulgar, este la pierde
nuevamente y concretaría Rubio el uno a cero para los azules a dos minutos de
iniciado el encuentro.
Ribery Muñoz también perdería el balón para el segundo gol. Una vez
recuperado el esférico por parte de los azules, la jugada la terminaría José
Rojas, que tras eludir la débil resistencia de Cordero y Juan Pablo Gomez,
mandaría un centro a la entrada del área grande para que Corujo conecte de
volea.
Universidad Católica, pese a tener buenos nombres
en medio terreno, nunca logró tomar el control del partido. Muchos pases
erráticos permitieron al rival sacar ventaja. Tanto Costa como Parot,
estuvieron muy poco finos a la hora de entregar balones y resguardar la
posesión. Si bien Falcioni intentó resguardar la posesión de
balón jugando con un bloque más corto en el segundo tiempo y ocupando a Darío
Botinelli en reemplazo de Michael Ríos, no le fue suficiente tomando en cuenta
que los demás jugadores estaban siendo erráticos.
Las distracciones en el partido fueron tales en Católica, que en el
minuto 87 de partido ocurre una falta en el círculo central, la cual toma
Benjamín Vidal y al ver que los jugadores cruzados no están pendientes de
Patricio Rubio ni de su actuar, lanza el balón hacia este último y este define
ante la salida de Constanzo para el tres a cero final.
Martín Lasarte, técnico que ha tenido que luchar contra una serie de
lesiones en su plantel, enfrentó el partido utilizando la misma distribución de
siempre pero con algunos nombres distintos.
CRISTIÁN SUÁREZ Y JOSÉ ROJAS
Lasarte, ante la suspensión de Sebastián Martínez, quiso jugar con Mathías
Corujo como volante en mediocampo. Para ello, tuvo que colocar a alguien en el
sector derecho. El encargado de cubrir esa zona sería Paulo Magalhaes, quien
anteriormente había jugado en esa posición en la U. Cristán Suárez entonces,
quién había tenido un buen cometido frente a Palestino el partido anterior como
central, esta vez repetiría la posición dejando a José Rojas como lateral
izquierdo.
Estos últimos jugaron un muy buen partido pese a no
estar en sus posiciones habituales. Cristián Suárez tuvo un excelente cometido
robando e interceptando balones tanto en área propia como en mitad de cancha
por momentos, tarea que incluso le permitió robar el balón del primer tanto
azul. José Rojas por su parte, se mostró con mayor
confianza y cubrió de buena manera su terreno de juego evitando los desbordes
de José Luis Muñoz. Fue tal el entendimiento que hubo entre ambos, que
finalmente sería José Rojas el que se aventuraría en campo rival, para meter el
centro que significó el segundo tanto de la escuadra de Lasarte.
Gráfico Defensivo Cristián Suárez
MATHÍAS CORUJO
El volante Uruguayo, de mucha exuberancia física y llegada a campo
contrario, fue ubicado en medio terreno esta vez con la tarea de cubrir la zona
central derecha azul y de acompañar más de cerca de Gustavo Lorenzetti para
crear una especie de triángulo que no permitiese progresar a Universidad
Católica. Corujo, estuvo siempre pendiente de lo que hacía Tomás Costa y de
entregar balones a sus compañeros para iniciar el ataque del elenco azul. Su
participación fue tal en terreno contrario, que sería él quien finalmente
remataría tras el centro de Rojas para el segundo tanto.
MICHAEL RÍOS Y LOS DELANTEROS DE CATÓLICA
Michael Ríos es un volante, usualmente por derecha, que ha sido
utilizado en varias ocasiones por Falcioni para cumplir labores de medio campo
por el centro hacia la derecha. En esta oportunidad, Julio César probó con Michael Ríos como número 10 del cuadro cruzado.
El tema es que a pesar de haber tenido una expedición regular (para un puesto
que no maneja) sus principales acompañantes, los delanteros, nunca se mostraron
pendientes del balón y con algún interés por recuperarlo y acompañar a Michael
Ríos en sus jugadas. José Luis Muñoz, el más libre en cuanto a movimientos,
no logró concretar oportunidades del gol ni juntarse aprovechando su libertad,
con Michael Ríos. Mark González, se mostró muy ceñido a su banda y nunca logró
la profundidad requerida. Finalmente, Ramiro Costa no logró ser de mayor
peligro ante la zaga azul.
Gráfico Pases Michael Ríos
Cuando Michael Ríos fue reemplazado por Darío Botinelli, el equipo de
Falcioni comenzó a jugar más en corto, achicando los espacios para no ser
abatidos por contragolpes. Sin embargo, la falta de concentración por parte de
la zaga de Universidad Católica, trajo como consecuencia que el desempeño en
este último tramo fuese infructuoso, a pesar de la mejoría en el juego
colectivo.
GUSTAVO LORENZETTI Y LOS DELANTEROS DE LA U
Lorenzetti entró en este partido en desmedro de Ramón Fernández debido a
su buen desempeño en el último partido frente a Palestino. Sin embargo y pese a ser el artífice del primer tanto, Gustavo no logró
ser gravitante durante el encuentro y sumó sencillamente como un jugador más en
ofensiva, sin ser el conductor del equipo. Bajo esta perspectiva, la fortaleza
de Universidad de Chile se vio plasmada en los pies de sus delanteros.
Sebastián Ubilla, quien temprano saldría por lesión tuvo un buen
cometido por el sector izquierdo, si bien no persiguió en todo momento a
Alfonso Parot, lo mantuvo en su área en varios pasajes del primer tiempo.
Gustavo Canales como siempre, se enganchó para participar en mediocampo junto a
sus compañeros en la elaboración de jugadas. Robó balones y fue importante en
el primer tanto ya que apuró a Pulgar en la entrega de balón. Siempre se
predispuso a participar en labores defensivas. Patricio Rubio entregó una
sólida actuación en el partido. Bajó por momentos para marcar a Juan Pablo
Gómez cuando este intentaba subir, se centralizó para recibir balones e iniciar
jugadas de peligro y participó en el primer y último tanto del encuentro.
Disposición táctica después de los cambios
Tras la lesión de Ubilla, Enzo Gutierrez entró para poblar el sector
izquierdo. Tanto él como Fernández, entrarían a reforzar el contraataque del
conjunto azul durante gran parte del segundo tiempo. Fernández reforzaría como
enganche y se posicionaría por derecha en ofensiva y Lorenzetti recostado como
volante por izquierda, subiría para reforzar el sector ofensivo y formar una
línea de dos volantes ofensivos. Esto permitió continuar la presión y
finalmente ganar el último balón de gol que concretaría en el minuto 87
Patricio Rubio.
CONCLUSIÓN
Universidad Católica no planteó bien el partido. Falcioni intentó jugar
con un enganche improvisado y si bien logró mantenerse en el puesto, los demás
no jugaron con él. Además, la falta de concentración permitió a Universidad de
Chile recuperar balones que encontraron muy mal posicionada a la defensa de
Universidad Católica y que finalmente terminaron en los goles del triunfo.
Universidad de Chile por su parte, aprovechó los
errores de su rival y concretó en tres oportunidades sin tener un fútbol
brillante. A pesar de tampoco tener un jugador que moviera los hilos, las
individualidades brillaron y su zaga se mostró más sólida con la nueva
configuración presentada por Lasarte.
La lucha por el primer lugar está en disputa a falta de cuatro fechas.
Universidad de Chile ha cimentado el camino para alzarse con el título y
Universidad Católica aún muestra posibilidades de entrar en zona de play-off.
¿Podrán mejorar sus debilidades para los siguientes partidos?
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