Por: Luis Suárez (@Luije77)
Venezuela, un país en el que el fútbol juvenil vive
circunstancias difíciles por la poca inversión privada y pública, el mal estado
de muchos de los terrenos en los que se juegan y pocas condiciones para
garantizarle el futuro a quienes ven este deporte como una manera de
subsistencia.
Tras la eliminación del Sudamericano Sub-20, las
alarmas deben prenderse en la nación que tiene a Juan Arango como el futbolista
más grande de su historia. No solo por lo que significa perder 3 de 3 partidos
en la primera fase (hasta el momento de escribirse la nota), sino porque la
Vinotinto lleva 3 torneos en los cuales ha sido eliminada en la primera fase:
2009, 2011 y 2013.
Perú 2011:
- En 2011 el técnico era Marcos Mathias,
uno de los hombres de confianza de César Farías. En la selección
venezolana faltaron nombres de categoría como Fernando Aristeguieta,
Josmar Zambrano y Franco Signorelli, estos dos últimos ya hacían vida en
el Viejo Continente. Sin embargo, en la nómina resaltaban Yohandry Orozco
(capitán), Josef Martínez, Alexander González, Wilker Ángel y Jesús
"Chuto" Lugo.
Aquel año llegaba con el aliciente de la edición
anterior, en la que la histórica Selección que tenía a José Salomón Rondón en
punta había podido clasificar al Mundial de Egipto. El mismo Orozco había
podido ir a la magna cita como el jugador más joven de la plantilla.
En ese año, los vinotintos no pudieron conseguir
el objetivo al empatar en la primera ronda con Uruguay, Argentina y Perú. Lo
único rescatable fue el golazo de Yohandry Orozco contra Perú, cuya importancia
lo hizo acreedor de reconocimiento mundial. Posteriormente, el volante '10'
zuliano ficharía con el Wolfsburgo de la Bundesliga.
Argentina 2013:
- El mismo Mathías tenía dos años después una
Selección llena nombres rutilantes. Para muchos especialistas, era quizás la mejor
plantilla en años que tenía Venezuela. Wilker Ángel, Manuel Arteaga, Josef
Martínez (capitán), Juan Pablo Añor, Darwin Machís, José Contreras y
Víctor García formaban parte del equipo que hacía soñar a su país con la
segunda clasificación a un Mundial de la categoría.
Más allá del buen nivel de Josef Martínez,
Venezuela no mostró galones para ser protagonista en un torneo en el que Brasil
y Argentina tampoco pudieron clasificar al evento mundial. 4 puntos de 12
posibles (victoria ante Ecuador, derrotas contra Perú y Brasil y empate
vs Uruguay) mandaron a la Vinotinto rumbo a Caracas.
El empuje de Martínez no fue suficiente y Mathías fue criticado a lo largo del torneo por el poco uso que le daba a un volante '10' que el público había oído mucho, pero poco había visto: Juan Pablo Añor. El del Málaga casi le dio la clasificación a segunda ronda cuando en el último partido contra Uruguay entró al campo, marcó y casi logra la hazaña de anotar otro.
Uruguay 2015:
- Le llegaba el turno a Miguel Echenausi en el
banquillo nacional. El otrora jugador profesional e internacional con
Venezuela tenía la obligación de
comandar un grupo con talento que venía con la carga de haber calificado
al Mundial Sub-17 de la mano de Rafael Dudamel. John Murillo, Andrés Ponce
(capitán), Yanowsky Reyes, Óscar Guillén y Jefre Vargas eran los
encargados de lideraron un equipo con mucho rodaje en Primera.
En los Juegos Centroamericanos y del
Caribe, Echenausi había tenido un grupo explosivo en
ataque, pero vulnearable en defensa. Como era natural previo al torneo,
Venezuela llegó a la final contra México, equipo que desnudó a placer al
combinado sudamericano. Las malas maneras del equipo revivieron en el torneo
celebrado en Uruguay. Derrotas ante Chile, Brasil y Colombia dejaron sin opción
de clasificación a los venezolanos.
A la Selección de Venezuela le faltó
efectividad. No pudieron concretar ocasiones desde el minuto 1 de torneo, por
lo que increíblemente no marcaron goles contra las selecciones mencionadas. La
dirección técnica fue criticada por la ausencia de jugadores de la Primera
División como Jhónder Cádiz, José Caraballo, Leomar Pinto y Ronaldo Peña.
Se apreció un equipo rápido en ataque,
pero excesivamente pesado y perdido en el retroceso. Las líneas amplias mataron
el poder de asociación.
Además, en la banca se fundieron otros
como Adalberto Peñaranda y Ayrton Páez, de gran técnica ambos. El punto
positivo: Yanowsky Reyes, un diminuto volante de aceleración frenética y
cansancio casi nulo.
La FVF debe evaluar con detenimiento el
proceso concluído. Más allá de que Andrés Ponce haya firmado con la Sampdoria
de Italia (antes del torneo), el ciclo correspondiente al Mundial Sub-17 2013 y
el Sudamericano Sub-20 2015 es un claro ejemplo de anarquía.
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