Ads (728x90)



Adolfo Ríos (@Adolfoarios)


El pasado 5 de marzo, la joyita del fútbol paraguayo, Sergio Díaz cumplió 18 años. Se sorprenderán algunos tal vez, de haber oído ese nombre hace ya bastante tiempo. Es que Sergio ya había sido promovido a la Primera de Cerro Porteño a los 15 años y debutaba a los 16. El niño, que recién alcanza la mayoría de edad, ya lleva numerosas batallas (y perlitas para los amantes del fútbol) en su haber. Repasemos cómo le ha ido desde su debut en 2014 hasta hoy en día.

Diego Argota nos contaba sobre esta gran promesa, nos decía remember the name y nos anticipaba que Sergio estaría en el Sudamericano Sub 20 de 2015. En efecto, estaría en aquel Sudamericano y conseguiría la marca de 2 goles en 7 partidos, a sus 16 años. También jugaría luego el Sub 17, con la marca de 3 goles en 9 partidos, consiguiendo el pase al Mundial en Chile, donde nuevamente estaría presente.



En Cerro Porteño, inicialmente bajo el mando de Leonardo Astrada estuvo ausente por su participación en el Sub 20 y luego a su vuelta, sin descanso, se destacaba nuevamente con un gran gol ante Luqueño que combinaba su fulminante arranque, un repentino enganche y definición con su pierna menos hábil. También se destacaba en el superclásico ante Olimpia, en el que se imponían los azulgranas gracias a un penal generado por Sergio.




Tras los citados destellos de calidad, le costaría a Sergio mantener el nivel que se le había conocido. Se especularon con diversos motivos como psicológicos, de conducta (había tenido entredichos con el DT de la Selección Sub 20, Jara Saguier), de falta de descanso y por supuesto futbolísticos. En Cerro, tras la salida de Astrada quedaba al mando Roberto Torres, quien lo quitó de su hábitat natural de mediapunta con libertades para jugar, para reubicarlo en la función de volante por izquierda, lo cual implicaba más responsabilidades de marca. De ser el indiscutido Sub 20 del equipo (reglamentación de la liga paraguaya) pasó a alternar y hasta ser relegado por la presencia de Matías Rojas para dicho cupo.

“El niño” Díaz terminaba el primer semestre con un relativo bajón, pero celebrando su primera estrella local con Cerro Porteño, y con una transferencia caída a la Roma, que ya se daba por hecha a la espera de su mayoría de edad. Acostumbrándose paulatinamente a las nuevas funciones que le encomendaban, logró repuntar de cierta manera en el segundo semestre, pero el 2015 se cerraba con menos goles habiendo disputado más minutos que en 2014.

El 2016 toma a Cerro con nuevos bríos, con más de una docena de refuerzos, bajo el mando del venezolano César Farías, y nuevamente consolidado como el principal Sub 20 del equipo. Ya en el día de su cumpleaños celebraba con un gol ante Nacional, con un movimiento propio de un centrodelantero experimentado.



Tan solo 4 días despues, en un partido clave de Copa Libertadores, ante el rival más pintado del grupo, el Corinthians, y donde el DT Farías se jugaba la continuidad, Sergio se gana la titularidad por sobre nombres como Marcelo Estigarribia o José Ortigoza y se pone el equipo al hombro. Atrevido, encarador, causaba estragos en la defensa corinthiana pero perdía en el duelo con el arquero Cassio en dos ocasiones. En el segundo tiempo, tendría su revancha con un gol fiel a su estilo, digno del hombre con el que lo comparan, el Kun Agüero, con un arranque letal en piques cortos y definición sutil.



Los 18 años encuentran a Sergio Díaz en el asiento de conductor, con licencia para guiar a un Cerro que apuesta fuerte a la Libertadores, y con un brillo propio que recuerda que esto recién empieza, vuelve al ruido en el gran escenario que representa la Copa, a sabiendas de que, además de su gran presente, puede apostar en un gran futuro por delante.

Publicar un comentario