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Los procesos a mediano y largo plazo, en su mayoría, siempre son fructíferos. La perseverancia y el convencimiento son importantes para lograr el éxito. Y Ahmed lo sabe muy bien 



Luis Gonzales (@Luchvr) 

Hoy en día, los proyectos futbolísticos se han convertido en bases fundamentales para alcanzar los logros propuestos. En Perú, escasean, pero la llegada de un argentino comenzó a cambiar el panorama desde hace unos años. La permuta de ese panorama lo hizo Daniel Ahmed.

Como futbolista, fue delantero. Debutó en el 98’ en San Lorenzo y su carrera paseó por España, Japón, Paraguay y Chile, en donde se retiró en 1995. La notoriedad llegó a él en su paso por la profesional, pero sí como entrenador.

Su aprendizaje comenzó, nada más ni nada menos, que con Marcelo Bielsa. Ahmed fue parte del comando técnico del ‘Loco’, cuando este fue el entrenador de Argentina, en las Clasificatorias para el Mundial de 2002. A raíz de ello, en Perú se le reconoce como uno los técnicos ‘bielsistas’. “Trabajar con Bielsa fue como estudiar en Harvard”, comentó a un diario peruano.

Tras su paso por la Selección argentina, en 2009, Daniel asumió como jefe de las Fuerzas Básicas del Atlás de México. Su llegada a México, se dice, se debió a una recomendación de Bielsa –‘El Loco’ arribó en los 90’s al club de Guadalajara-. La relación con la institución se gastó y, tras casi tres años, dejó el club.

En 2012, llegó a un acuerdo con la Federación Peruana de Fútbol para asumir las Selecciones menores. El objetivo era el Sudamericano Sub 20 del año siguiente, torneo que daba el pase al Mundial de la categoría. Su trabajo se basa mucho en el convencimiento de sus jugadores y fue así como llegó hasta las instancias finales del torneo. Lamentablemente, se quedó a un gol de la clasificación, dejando a un grupo que, hoy en día, son parte de la Selección mayor: Christian Benavente, Renato Tapia, Yordy Reyna.

Al año siguiente, Ahmed asumió como DT de Sporting Cristal en reemplazo de Claudio Vivas, ambos, viejos compañeros -él y Vivas trabajaron juntos en Racing y Estudiantes- . En el club ‘rimense’ buscaron imitar el proyecto hecho en la Selección por él, pero no fue nada fácil.

Las críticas comenzaron tras su eliminación de la Copa Libertadores de 2014, en la fase previa. Pocos entendieron la importancia de mantener el propósito y tras una mitad de campeonato regular, los rumores de su salida acrecentaron. “Confiamos en Ahmed”, “Estamos pensado a largo plazo”, eran las respuestas de los directivos cuando le preguntaban sobre los malos resultados.

Pese a todo, terminó ganando el Clausura y el boleto a definir el Descentralizado. En la definición del título, se midieron con Juan Aurich –campeón del Apertura- en los Play Offs. El título se tuvo que definir en 3 partidos, siendo el último, victoria por 3-2 en un partido tan vibrante, que hasta el portero acabó perdiendo el conocimiento y la noción del tiempo. Y premio a la constancia y confianza hacia el proyecto.

“Me gusta que mis equipos generen juego desde su salida y gusto de los equipos que buscan elaborar y que sean intensos con el balón”, comenta el entrenador sobre su estilo de juego. Estilo que le demoró algunos meses en asimilar su equipo, pero que por último terminó consolidándose en el equipo.

A mitad de semana, en la Libertadores, ese Sporting Cristal terminó venciendo a Racing en su propio estadio. La última vez que se enfrentaron fue en 1997, en las semifinales, cuando los ‘celestes’ ganaron la llave y llegaron a la final del torneo.


La propuesta de Ahmed se basa en el buen juego y convencimiento del equipo hacia la idea. El estilo, el proyecto y otros aspectos, pasan por la mentalidad que pueda tener el grupo de trabajo. Hoy, Ahmed, lo ha conseguido. “Nuestro objetivo es ganar la Libertadores”, reveló al inicio del año. Su equipo es de los que mejor juegan en la Copa. Dejó escapar dos victorias increíbles, pese a ser superior. Para reponerse de tal manera y frente a un equipo como Racing, el trabajo sicológico debió ser fundamental. 

“Fracaso existe si un equipo que yo maneje no trata de jugar al fútbol, no trata de salir jugando, no trata de buscar dignificar este deporte hermoso que es el fútbol. Si los medios que uno emplea son nobles, el fracaso no existe”, contestó Ahmed cuando le preguntaron sobre el fracaso.

Los proyectos a largo plazo, para la mayoría, son los más gratificantes. El esfuerzo para llevarlos a cabo es notorio en los resultados y estos son consecuentes al trabajo. Así como los proyectos de Ahmed.

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