Ads (728x90)



Eduardo Zabala (@monopandillero) para @Futboldecafe

Si alguno mira las principales estadísticas del Clausura 2015 de la Liga MX, podría sorprenderse de que Tigres lidere prácticamente todos los rubros defensivos y, ojo, los ofensivos. La imagen que su entrenador, Ricardo Tuca Ferretti, ha creado a lo largo de su carrera, podría resultar chocante al comprobar que, por ejemplo, Tigres ha disparado en el torneo 40 veces más que el líder Xolos o que ha completado casi 660 pases más que el Atlas de los centrocampistas (vía www.ligamx.net).

Entonces, ¿qué hace Tigres para tener esas estadísticas? Intentemos descubrirlo.

Es necesario comenzar mencionando que Tigres no es un equipo capaz de imponer su plan de juego sobre todo sus rivales. Esta inconsistencia se puede situar en su salida de balón. Los felinosacostumbran a salir en corto, intentando crear superioridades desde el inicio de las jugadas, sin embargo, si el rival le presiona arriba con mucha gente, el equipo regio no siempre tiene las respuestas para superar escenarios de este tipo. Además, Ferretti ha modificado el plan y el sistema para encarar algunos partidos de visitante, priorizando el tener un mayor número de efectivos por detrás de la pelota, como ocurriera en el Monumental de Buenos Aires, y en los partidos ante Leones Negros, Santos o Jaguares.

Aclarado esto, vayamos a la parte central de este texto: la fase ofensiva de Tigres.
En primer lugar, el conjunto del Tuca localiza en las bandas su etapa de gestación. En los flancos, el equipo de la UANL involucra, principalmente,  a tres piezas en su cadena de pases y movimiento: el lateral, el mediapunta de banda y el interior (en derecha) o mediapunta (en izquierda). Ellos dictan el ataque, delatando una armonía en sus movimientos que hace difícil no alabar el trabajo de su entrenador. Independientemente de cuales sean esos tres jugadores (Jiménez/Gutty Estrada, Lugo/Burbano y Dueñas en derecha; Torres Nilo, Damián Álvarez/Burbano y Sobis/Villalpando en izquierda), la premisa es dibujar tres alturas tanto de manera horizontal, como de forma vertical. Esto eleva la velocidad en la circulación, facilita la creación de espacios interiores, permite ganar muchos metros en la cancha y desorganiza al rival.



Dentro de estas tercias, hay dos jugadores que resultan decisivos: Jesús Dueñas y Rafael Sobis. Seguramente ambos sean los jugadores más intelectuales de la plantilla cuya influencia resulta vital para que su equipo someta a los rivales. Ambos poseen la capacidad de detectar el espacio oportuno para desplazarse, ya sea para recibir ellos mismos el balón o para descubrir una zona para que sus compañeros la exploten.
A su vez, emerge la figura de dos futbolistas más. Tanto el delantero (Jofre Guerrón), como el mediocentro (Guido Pizarro/Árevalo Ríos), acuden a la banda, aunque de manera distinta. El primero tiene la misión de picar a la espalda del lateral, buscando atraer al central de turno hacía el costado e inquietar al propio marcador de punta, quien se ve forzado a tomar decisiones que demandan mucho talento defensivo. Por otro lado, el mediocampista central sirve como apoyo detrás del balón. Si el rival bascula de manera adecuada, el MC se involucra en las cadenas de pases buscando la superioridad numérica.


Es la siguiente fase de la jugada donde la escuadra felina saca redito de todo el trabajo previo. Volcado hacía un ala,  para el rival resulta complicado defender el lado débil porque los atacantes de Tigres tienen en su repertorio tanto el regate (Burbano, Damián, Lugo), como el golpeo de larga distancia a portería. Las ventajas antes creadas, permiten recepciones cómodas para terminar las jugadas.  De nuevo, los jugadores que mejores beneficios obtienen son Dueñas y Sobis. Los dos están atentos para recibir siempre con tiempo y espacio en la frontal del área, donde su disparo al arco resulta la principal vía de goles para su equipo (gol de Sobis vs Pumas).



Finalmente toca hablar de los pros defensivos que este plan representa. Si Tigres realiza con éxito todo lo anteriormente descrito, el adversario queda aplastado y desorganizado, mirando a su arco y con muchos jugadores de Tigres cerca de la perdida. Todo esto facilita la recuperación del balón y aleja al oponente de la puerta defendida por Nahuel Guzmán.
Hay pocas dudas de que este es el gran aval competitivo del equipo de Ferretti que sueña con el doblete. Si son capaces de establecer su plan, habrá muy pocos rivales que puedan resistir ante los picos de juego de Tigres. Y no solo hablábamos de sus contrincantes en la Liga MX, sino que también incluimos a los favoritos para ganar la Copa Libertadores. Sus seguidores pueden estar ilusionados.


Publicar un comentario