Por: Adolfo Ríos (@adolfoarios)
Paraguay
nunca se ha caracterizado por ser un país exportador de jugadores a las grandes
ligas europeas como Brasil o Argentina, o también Colombia y Uruguay hoy en
día. Las mejores campañas de su selección en Eliminatorias, o inclusive Mundiales,
las ha logrado con jugadores destacados principalmente en Sudamérica y México.
Por supuesto que, como en toda norma, han habido excepciones contadas como por
ejemplo Roque Santa Cruz en el Bayern Münich (campéon de Champions League) o
Roberto Acuña en el Zaragoza (seleccionado mejor jugador latinoamericano de La
Liga en alga temporada).
Sin
pegarse el lujo de contar con estrellas de grandes equipos de Europa como las
selecciones de Argentina (Messi, Di María, Agüero, etc), Chile (Vidal, Sánchez,
Bravo, etc), Colombia (James, Falcao, Ospina, etc) o Uruguay (Suárez, Cavani,
Godin, etc), la Selección de Paraguay se las ha arreglado con su reconocida
garra y mística para pelear codo a codo con las anteriormente mencionadas
eliminatoria tras eliminatoria, las clasificaciones a mundiales. Por dar un
breve repaso, la Selección de Paraguay que clasificó al Mundial de 2010 (y que
llegó hasta Cuartos en ese torneo, eliminándose tras haber puesto contra las
cuerdas al campeón España) tenía entre sus jugadores claves a Salvador Cabañas
(América), Cristian Riveros (Cruz Azul), Paulo Da Silva (Toluca) en la liga
mexicana, o el mismo Enrique Vera en Ecuador (Liga de Quito). El jugador más
destacado a nivel internacional era un Oscar Cardozo que se hizo leyenda en el
Benfica de Portugal, pero que no formaba parte del onceno base de Martino. Las
excepciones las constituían Roque Santa Cruz en la Premier League
(Blackburn/Man City) y Nelson Haedo (Borussia Dortmund). Figuras de
generaciones anteriores como Chilavert, Gamarra, Ayala o Cardozo, tampoco han
alcanzado su pico máximo de rendimiento en Europa.
Sin
embargo, la filosofía de juego y mentalidad que puedan inculcarse a los
jugadores que conformen la Selección Paraguaya podrían verse impulsados sin
dudas por este factor, sin olvidar mencionar la jerarquía individual que puedan
a llegar a tener los mismos. La intención es dar un vistazo al paradero de los jugadores con pasaporte paraguayo alrededor
del mundo, en un listado que evidentemente no es completo, pero que sin embargo
tiene en cuenta a aquellos que ya han sido considerados en anteriores
convocatorias en conjunción con los que, con varios años de carrera por
delante, se encuentran en ligas competitivas.
Algunas
observaciones:
-
Los nombres más reconocidos en el exterior siguen siendo los de Santa
Cruz y Cardozo, pero las carreras de ambos ya se encuentran en su recta final.
El más emergente sea tal vez el de Derlis González, que por el momento sigue en
la Liga de Suiza, pero que ya ha demostrado su capacidad en la propia Champions
League y ha llamado la atención de grandes equipos.
-
Los nombres que quedan en el Top 4 de ligas europeas (España, Italia,
Inglaterra, Alemania) son muy pocos. Entre ellos, Edgar Barreto (que ya ha
renunciado a la selección), Marcelo Estigarribia o Hernán Pérez (que aún no han
conseguido regularidad y pocas veces justificaron la convocatoria) e Iván Piris
(que también ha sido irregular, pero que ciertamente ha mejorado un tanto su
imagen en la última Copa América).
-
Nombres como los de Lorenzo Melgarejo, Celso Ortiz, Darío Lezcano o
Jorge Benítez han sido pocas veces escuchados en la selección, pero que bien
podrían considerarse merecedores de al menos alguna oportunidad dado el nivel
de competencia que tienen. Melgarejo ha ido a parar a un club de menos
renombre, pero tuvo un paso aceptable por el Benfica, disputando inclusive una
final de Europa League ante el Chelsea. Ortiz lleva varios años en Holanda y lo
mismo ocurre con Lezcano en Suiza.
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Las promesas son contadas, pero existen y varios jugadores podrían ser
fogueados siempre que las ocasiones sean propicias. Antonio Sanabria (ex
Barcelona y con minutos en la Primera de Roma) ya ha sido partícipe de varios
partidos con la selección. Sergio Díaz partirá entre este año y el próximo al
mismo club. Iván Cañete ya ha tenido roce con las selecciones Sub20 y Sub22;
mientras que otros como Alborno o Caballero se han ido perdiendo, pero bien
podrían lograr su madurez futbolística en cualquier momento mientras que hay
otros casi desconocidos por la afición como los de Rojas, Meza o Agüero.
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Se dispone una gran base de jugadores en Sudamérica y México, que como
ha sido costumbre podrían constituir en la columna vertebral del equipo.
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El arco es el principal déficit de Paraguay. Con Justo Villar en sus
últimos años, aún no existe un nombre que se constituya con fuerza en el
principal candidato a recambio. Anthony Silva respondió en la última Copa
América y podría ser el arquero por al menos un ciclo más.
Mirando
el panorama general, podría quedar un dejo de pesimismo, pero dados los
antecedentes ya mencionados al inicio del artículo, el cuerpo técnico de Ramón
Díaz tiene material como para conformar un equipo competitivo.
En la
liga local también existen jugadores que ya han asomado en la Albirroja como
Alfredo Aguilar, Bruno Valdez o Fabián Balbuena. También se vio la influencia
de la reglamentación que limita a los clubes a contar con un máximo de dos futbolistas
extranjeros en cancha, con lo cual se precipitó la vuelta de varios jugadores
tales como Richard Ortiz, William Mendieta o José Ariel Núñez, de quienes se
espera que puedan retomar su nivel para formar parte del seleccionado.
Mientras, se espera que los semilleros sigan brotando y que en un futuro no muy
lejano se pueda hablar de figuras paraguayas en las grandes ligas de Europa, mediante
el respaldo de la reglamentación impuesta en la liga local con la
obligatoriedad de la presencia de un jugador Sub20 en la alineación inicial
desde hace un año y medio, y que ya ha develado a algunas promesas
interesantes, las cuales abordaremos en un próximo artículo.
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