Mijail Mercado (@_Mijailovic)
Transcurría la época
de la guerra civil en España, la pareja de esposos Aicart-Iniesta partieron con
rumbo a Sudamérica en 1936 con su hijo mayor José. En la peregrinación por el
nuevo continente, la familia española llegaría a Bolivia, donde el 21 de febrero
de 1952, en la población de Chulumani de La Paz, nacería Pedro Aicart Iniesta.
Su familia se
va a movilizar entre viajes y viajes en Bolivia y el país vecino Perú, en donde finalmente,
tres años después de su nacimiento, se establecen en Perú.
Demostrando su
afinidad con el deporte más lindo del mundo, desde muy joven corrió detrás de
un balón en las canchas y calles de Lima. Su talento para el fútbol, muy poco
reconocido en Perú debido a la gran generación de futbolistas de la época, lo
llevó a participar de hitos muy importantes de la historia del balompié
peruano, tales como alcanzar la primera final de un equipo incaico en Copa
Libertadores y formar parte del grandioso FC Barcelona de Johan Cruyff.
INICIOS
Muy joven, en Lima, Pedro
Aicart se une al club Universitario de Deportes desempeñándose como un hábil
delantero de 1.72 mts de estatura, veloz y movedizo, era el delantero que le
gustaba desbordar por la banda derecha hacia el interior del área rival. En
1972 a la edad de 20 años fue dirigido por el uruguayo Roberto Scarone.
Aicart con su
juventud, vio pocos minutos, tanto en el torneo descentralizado de Perú como en
la Libertadores 1972.
LA GRAN OPORTUNIDAD
El equipo “crema” de
“la U” fue la base de la grandiosa selección peruana de la época que logró
clasificar al Mundial de México 1970, Argentina
1978, España 1982 y que conquistaron la Copa América de 1975. Ante este grupo de
jugadores Aicart tuvo pocas chances de jugar, hasta que se instruyó una
gira de preparación donde los habituales titulares del
equipo de la U cedieron el paso a los suplentes y más jóvenes del equipo para
hacerse cargo de primer campaña memorable en la Copa Libertadores del conjunto
crema. Es así que Aicart logró ser protagonista en la Copa donde se midieron en
la primera fase ante Alianza Lima, Universidad de
Chile y Unión de San Felipe, ganando la serie y clasificando a semifinales.
Aicart no marcó goles pero tuvo minutos y le bastó un
par de apariciones para que los ojeadores del Barça lo fichasen.
En semifinales,
compartieron serie con los uruguayos Peñarol, campeón de la liga charrúa y
Nacional (U), campeón vigente de la Libertadores. La U ganó nuevamente la serie
y se clasificó la final para enfrentarse contra Independiente de Avellaneda, sin
embargo no la jugó: “Antes del primer
partido contra Independiente, y con el plantel ya concentrado, se nos acercó
Scarone y don Miguel Pellny para hablarnos, nos dijeron: ¡Muchachos la
selección llega mañana! (de su gira). Uno a uno nos fueron llamando a la
oficina y nos llevaron a nuestras casas. No jugamos ningún partido de esos.
Tuvimos que escucharlo por la radio” contó Pedro Aicart en su última
entrevista concedida al diario El Comercio de Perú el año 2012.
Ante la frustración
de no jugar la final por la que tanto había trabajado aquel equipo “suplente”,
el destino le tenía preparado una gran sorpresa. De las palabras del propio
Pedro Aicart: “Los mismos dirigentes que vinieron a Lima para llevarse a Teófilo
Cubillas, y terminaron por fichar a Sotil, me vieron en el partido contra
Nacional de Uruguay en Lima en las semifinales, que ganamos 3-0. Dicen que
también me siguieron en el partido de vuelta. La cuestión es que el emisario
del Barça habló con mi papá y viajamos. ¡Imagínate! No tenía ni un año en
primera y ya estaba en el Barcelona”.
El traspaso se hizo
por la ventaja de que Aicart tenía también la nacionalidad española de sus
padres. El delantero cuenta: “Los del
Barça pagaron cien mil soles de esa época. La U recibió ese dinero después del
contacto con el presidente José María Minguella. Tuve que hacer una prueba
contra el Arsenal de Inglaterra, en el Camp Nou, jugué y me aprobaron. Todo lo
que yo sabía del club por mi familia se quedó chico. Era como estar en otro
mundo”, afirma Aicart que compartió cancha con su compatriota peruano Hugo
“El Cholo” Sotil y el mismísimo Johan Cruyff en aquel partido amistoso de
prueba en 1973.
EL AGRIDULCE SABOR DE UNA CARRERA CON POCAS
OPORTUNIDADES
La presencia de un
joven Pedro Aicart pisando suelo catalán hizo eco en la prensa local. El nuevo
refuerzo del equipo blaugrana era extranjero, en ese entonces solo se permitía
dos foráneos por club, cupos ya ocupados por Cruyff y el peruano Sotil.
El pasaporte
boliviano-peruano-español de Aicart lo sometió a un problema burocrático para
regularizar su situación de ciudadano “oriundo” y poder jugar en La Liga de
España, por eso tuvo que pasar toda la temporada 1973/1974 fuera del
banco sin ver minutos y ver como el club catalán, dirigido por Rinus Michels consiguió el trofeo de campeón después de 13 años sin ganarlo.
Una vez habilitado
plenamente, en la temporada 1974/1975, el conjunto culé decidió cederlo al
Hércules de Segunda, donde jugó solo 5
partidos y anotó un solo gol en el último partido de la división de ascenso
cuando el Hércules derrotó 1-2 al Osasuna y el club de Alicante logró inscribir
su nombre en Primera para el siguiente período.
En su retorno al FC
Barcelona, Aicart volvió inmediatamente en la filial del equipo, el
Barcelona Atlético de Segunda. Allí jugó 18 partidos,
convirtiendo 5 goles.
La temporada
siguiente, Aicart es cedido nuevamente, pero esta vez al Málaga, quien tenían la intención de volver a Primera. Aicart arrancó de titular; sin embargo fue relegado al banco de suplentes casi toda la campaña
restante, acumulando así solo 14 partidos y sin anotar goles. El club malagueño
logró finalizar el torneo en la tercera colocación, consiguiendo así su ascenso.
Aicart
permaneció en el Málaga donde se asentó como titular en la delantera junto con
el argentino Castronovo. Logró disputar 28 partidos y marcó dos goles; sin embargo el
club malagueño quedó último aquella campaña y descendió de categoría.
Tal vez por la
frustración de no haber cumplido los objetivos deportivos trazados, el
delantero deja la práctica del fútbol con apenas 25 años y se muda a Sevilla
donde realiza el curso de entrenador.
Tres años después en
1980 regresa a Perú donde desempolva los botines para jugar en el Juan Aurich,
donde contribuye a evitar el descenso del equipo.
Al año siguiente es
fichado por el club donde inició su carrera, Universitario de Deportes, donde
jugó por dos años hasta la temporada de 1982 y logró salir campeón, pero sin anotar goles y jugando muy poco. Posteriormente a ese título con el
conjunto crema, se retira del fútbol.
Pedro Aicart, abre su
propia escuelita de futbol y es nombrado miembro honorario de la Peña blaugrana
de Lima, por su pasado en Barcelona.
A la edad de 61 años,
fallece de un paro cardiorrespiratorio el 28 de Julio de 2013. Su origen, en el cual nace en Bolivia es muy poco conocido, solo a través de las
propias palabras es que se sabe tal curiosidad. No brilla como una
estrella en su carrera, pero su historia deportiva se deben conocer.
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