Kevin Schepmans (@KevinSchep)
Ya ha pasado un año y nueve meses desde
que el 28 de abril de 2013 fuese la fecha en que la selección Sub-17
venezolana, comandada por Rafael Dudamel, los goles de Andrés Ponce y una
férrea defensa, alcanzó la mejor actuación masculina en un torneo continental
para el país al quedar subcampeona del Suramericano disputado en Argentina, y
haber logrado la gesta de clasificar a Venezuela a su segundo Mundial de
categorías juveniles en la historia.
Antes del Mundial Sub-17 en los
Emiratos Árabes Unidos, el grupo sufrió las bajas de sus dos máximos baluartes:
Ponce, por una lesión de rodilla (mientras surgían rumores sobre su edad y
nacionalidad) y Ronaldo Peña, ya que el atacante del Caracas FC era apartado
por el DT tras múltiples casos de indisciplina unos días antes de que Dudamel
diese la lista definitiva para la Copa Mundial. Venezuela se iría eliminada del
campeonato en primera fase sin cosechar un solo punto y con 9 goles encajados
en 3 encuentros.
Todo salió mal en esa decepcionante
actuación, hasta cierto modo fatalista por la alta expectativa que recaía sobre
los muchachos al ser los segundos mejores de América del Sur y que Argentina,
Uruguay y Brasil, los otros tres clasificados, si lograran avanzar de ronda.
De aquellos 23 nombres mundialistas,
hoy en día solo permanecieron 5 de esa generación. Para este proceso, Marcos
Mathias, antiguo seleccionador de la categoría es relevado por Miguel “Pochito”
Echenausi, otrora jugador argentino internacional por Venezuela que marcara en
aquel recordado 3-3 contra Estados Unidos en la Copa América de Ecuador 1993.
Sí, cabe acotar que a esta generación
se suman los jugadores nacidos en 1995, pero es alarmante la poca progresión
que gran parte del conjunto tuvo. Fuera quedaron de la órbita vinotinto nombres
prometedores como Maceira, Tineo, La Mantía, Benítez, Pinto, Caraballo,
Rodríguez o hasta el mismo Zalzman, quien llegaba en 2013 al Deportivo
Anzoátegui tras haber jugado algunos años en La Masía culé.
El once
Portero - Beycker Velásquez
El ancla del barco. Es uno de los
puntos más sólidos de esta generación de jugadores y en quién recaerá la
responsabilidad de trabajar más de la cuenta con los ya mencionados problemas
defensivos de la selección. Seguro en las salidas, con buenas manos y mejor aún
con el juego de pies, ya que es toda una rareza conseguir a un golero que
maneje los dos perfiles como él. Se asemeja a Renny Vega, quien es además su
ídolo.
Defensas – Jeffre Vargas /
Franko Díaz / José Marrufo / Carlos Cermeño
Resulta curioso que una defensa tan experimentada de partidos en primera división haya tenido tantos problemas en los cotejos previos de preparación. México desnudó en la final de los Juegos Centroamericanos y del Caribe lo que era hasta el momento un mito; ¿Esta Vinotinto defiende bien?
Esto fue uno de los puntales de esta
generación en su época Sub-17 pero con el cambio de técnico y de modelo de
juego, todavía no. Han tenido problemas afinando las coberturas y sufre como
pocos equipos al retroceder en los contragolpes, usualmente recurriendo a que
Velásquez salve el marco con una espectacular atajada. Díaz específicamente se
ha visto dubitativo en los Centroamericanos así como en el pasado torneo
cuadrangular en San Cristóbal y debe levantar el nivel, además de su confianza
en los cierres.
Los laterales tienen proyección
ofensiva, con Jeffre Vargas teniendo los galones para acompañar los ataques
vinotintos, al tener ya experiencia jugando encuentros internacionales de Copa
Libertadores. Cermeño cumple en el lateral zurdo, posición tan demandada en el
fútbol nacional por la carencia de jugadores aptos para el perfil de esa banda.
Mediocampo
- Óscar Guillén / Kenny Romero
Jhon
Murillo / Ayrton Páez / Yanowsky Reyes
En ataque, los mediocampistas de esta
selección crean mucha ilusión con el desparpajo, creatividad y velocidad del
trío Jhon Murillo, Ayrton Páez y Yanowsky Reyes. De Murillo ya queda poco qué
decir: el mejor, de lejos, de esta camada.
El nativo de El Nula nacido en el ´95
ha despuntado en el torneo local con el Zamora de "Chita" y también
en el ámbito internacional suramericano, con su regate endiablado, agilidad,
ayudado por su corta estatura, centro de gravedad bajo y potente tren inferior,
son la mejor garantía para destrabar los partidos. Dará el salto al exterior
después del Suramericano.
Ayrton Páez es uno de los tres #VenEx y
desconocido por el fanático local, siendo ficha del Mallorca de la segunda
división española y jugando actualmente en su filial. Es un “10” nato con
buena visión de pase y técnica, pero tiende a gravitar sin asociarse, con poca
entrega defensiva y si no está en su día, usualmente es el primer cambio en el
segundo tiempo. De Yanowsky se sabía que tenía mucho talento, pero fama de
problemático fuera de las canchas, y se espera que sea la chispa; aprovechará cualquier rendija para colarse entre los defensas y desequilibrar, como la otra
gran opción de peligro en tres cuartos de cancha.
La contención ha sido el punto más flojo
del equipo, visto que el jugador revelación del Aragua FC, Kenny Romero, ha
sido insertado en la titular para proveer garra y velocidad en detrimento de
Carlos Sosa. Dudamel hace dos años hizo brillar a la selección con un 3-5-2 muy
dinámico, y con el nuevo esquema 4-2-3-1 de Echenausi, se dejan muchos boquetes
en defensa.
Delantera - Andrés Ponce
El referente arriba. Definición de goleador
de raza. En el Suramericano Sub-17 pasado marcó 7 dianas, siendo el segundo
mejor anotador del torneo y es quien en soledad arriba está encargado de seguir
convirtiendo todas las que tenga. Recientemente fichado por la Sampdoria de la
Serie A, que inteligentemente aseguró al talentoso zuliano y se adelantó al
interés de otros clubes que seguro vendría una vez empezado el torneo. Patea
con ambas piernas, protege y pivotea con habilidad, gana con su físico y además
va muy bien de cabeza; Ponce es la garantía del gol Vinotinto.
La incógnita – Jaime Moreno
El juvenil goleador anzoatiguense emigró esta temporada al AEL Limassol de Chipre tras anotar 9 goles en sus últimos 20 partidos en el torneo local, pero por problemas con su transfer, no llegó a debutar con el equipo chipriota en ningún encuentro oficial. El colorado regresó de nuevo al Anzoátegui en búsqueda de continuidad, con la incógnita sobre si podrá aportar a la Selección con el cartel de haber estado en Europa a pesar de su falta de rodaje. Además, tendrá competencia en el banco con Adalberto Peñaranda, quien puede deslumbrar con su habilidad así como decepcionar con su poco entendimiento del fútbol en conjunto, y a Juan Azócar, que ha gozado de pocas oportunidades en una plantilla del Deportivo Táchira que nuevamente se arma este año a punta de chequera.
Esta Selección se desdobla con soltura
en ataque gracias a que Murillo y Reyes tienen la capacidad de aterrorizar a
las defensas contrarias, con Kenny Romero apoyando los ataques y Páez
filtrándose entre líneas. Los tres mediocampistas ofensivos aparecen situados
en la pizarra táctica con Ayrton de enganche, Murillo por la derecha y Yanowsky
por la banda opuesta, aunque tienden a intercambiar posiciones sin
inconvenientes para mantener honestos a los contrarios.
Será importante ver la capacidad de los
muchachos para defender resultados, dado que en sus últimos encuentros contra
Perú y Paraguay en el cuadrangular disputado en Pueblo Nuevo, no pudieron
contener la ventaja y recibieron 3 goles en cada cotejo, además de que se
vieron garrafales errores en la marca y dentro del área.
Venezuela quedó emparejada en el grupo
B del Suramericano Sub-20 a disputarse en Uruguay del 15 de enero al 7 de
febrero, con 4 cupos para el Mundial Sub-20 que se jugará en Nueva Zelanda.
Están en el denominado grupo de la muerte junto a Brasil, que siempre parte
como máximo favorito en toda competición, la Colombia de Joao Rodríguez, ficha
del Chelsea y jugando a préstamo en el Bastia francés; Uruguay, generación que
dejó nota alta en Emiratos Árabes de la mano del goleador del Sporting Braga,
Franco Acosta, y la sólida Chile, que nos acostumbra a dejar buenas actuaciones
en los torneos de esta categoría.
El 17 de enero en la ciudad de
Maldonado empieza un nuevo andar frente a Chile en el debut; una nueva ilusión
para este grupo, que intentará emular lo hecho por esta generación hace dos
años.
Buscarán ser la
tercera selección masculina en clasificar a un Mundial, y tras los recientes
éxitos en categorías menores vinotintos la expectativa crece cada día más.
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