Ads (728x90)



Rubén Guerrero Atilano (@RubénGuerreroA)

Este viernes, México inicia su camino hacia el siguiente Mundial. Contra El Salvador, el combinado que dirige Juan Carlos Osorio saltará a la cancha del estadio Azteca, esperando dar sus primeros pasos en el proceso selectivo de la Concacaf. Los reflectores se colocan sobre el accionar del timonel colombiano, para conocer, de cerca, su método sobre el campo.

Ante el sinodal en turno, y dicho en conferencia de prensa y entrevistas previas, Osorio dejó en claro que no improvisará y que a la grama los futbolistas jugarán con su perfil natural, como es el caso de Miguel Layún, quien poblará la parcela derecha, como lateral, cuando en el Porto, su equipo, juega del otro lado, generando peligro por su velocidad y técnica.

Se espera que el estratega sudamericano salga con un esquema similar al 4-1-2-3. Pararía Alfredo Talavera. La línea defensiva estaría integrada por el propio Layún, Héctor Moreno y Diego Reyes en la zaga central; Luis Fuentes como lateral izquierdo y como recuperador, el clásico '5', Alejandro Castro, que así se desempeña en Pumas, su club.

Adelante de Castro, por derecha Héctor Herrera y por izquierda el capitán y plurifuncional Andrés Guardado; adelante, línea de tres atacantes, pero solo uno fijo: Javier Hernández, acompañado por los costados con Raúl Jiménez, del Benfica, y Carlos Vela, de perfil zurdo, completando la oncena tricolor.



Con esta alineación, Osorio, un tipo analítico y calculador, sacrifica la competencia a nivel físico para ponerle temple al balón y también técnica; la mayoría de estos seleccionados son de buen pie. El juego por los costados será fundamental para generar peligro y desequilibrio ante un rival que intentará quebrantar el estilo fino y el toque en demasía.



Publicar un comentario