Por: Andrés Durán (@AndresEduardoD)
Aunque
muchos esperaban la renuncia de Noel Sanvicente, por lo pronto, no será así. El
técnico nacido en San Félix decidió continuar al mando de la selección
vinotinto y, a pesar del pésimo arranque de eliminatoria rumbo al mundial de
Rusia 2018, sus ganas de demostrar su valía aún se mantienen.
La
Selección Nacional inicia un nuevo año que los venezolanos esperan sea de
reinicio en los objetivos que debe tener la Federación Venezolana de Fútbol
(FVF) de cara a los próximos años. El año pasado significó el reflejo más
evidente de las disputas internas y el presente del fútbol venezolano, pero eso
debe quedar atrás.
Este año
todas las partes que forman parte de la Selección deben asumir responsabilidad
en sus correspondencias, basándose en claves que desde este espacio se proponen
para poder entrar en competencia.
1 Reordenamiento
de objetivos: Aunque cueste entender, la selección no puede
asumir sus próximos objetivos fijándose en el venidero Mundial. Por el
contrario, debe la directiva de la FVF y el cuerpo técnico sentarse y plantear
misiones que se acoplen a la realidad.
Trabajar
con el relevo: Dado el urgente cambio de propósitos que
necesita la selección, se debe comenzar a buscar en la próxima competición
(Copa América Centenario) a las próximas figuras que formarán parte del relevo,
tanto en el fútbol local como en el extranjero, buscando además la salida de
los locales a otros países con fútbol de alta competencia.
- FVF: Por
muy difícil que sea, este año debe ser de mucho trabajo al nivel interno de la
Federación y de aquellos aspirantes a la Presidencia de la institución.
Específicamente, los candidatos deben plantear soluciones coherentes a corto,
mediano y largo plazo que permitan, de una vez por todas, un verdadero avance
en el fútbol local y que genere el comienzo del trabajo desde la casa para
construir el verdadero sueño vinotinto. En el caso de los que aún se mantienen
en la institución, deben trabajar por adelantar las elecciones. No puede seguir
existiendo un vacío dirigencial por más que Laureano Gónzalez esté presidiendo
el puesto de Esquivel. Será ese el mayor aporte que puedan ofrecer los actuales
dirigentes para reducir el tiempo de la crisis futbolera.
1 Los
veteranos: Luego de conocer la renuncia de Amorebieta y de
hacerse pública una carta firmada por 15 jugadores, los protagonistas deben
volver a fijar posición pero en la cancha. Evidentemente, la crisis perjudica a
todas las partes pero los jugadores deben ser los pilares que permitan agravar
poco a poco el descontento. Sobre todo los más experimentados, que deben
apostar por devolver a la nación victorias más que derrotas dentro y fuera de
la cancha. Su contribución es crucial para el 2016.
Seguramente
falten muchas más claves que deban añadirse a la lista que debe asumir con
responsabilidad la FVF y todos los que en ella participan. Los venezolanos
esperan un verdadero avance y no únicamente de la Selección, sino del fútbol
local. La nación espera que este 2016 sea el año de un cambio en el balompié de
nuestro país.
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