Por: Miguel Peña (@Migueltals)
En
el mundo del fútbol existen dos tipos de delanteros. Uno es el que hace los
goles como sea y el otro, es el delantero que hace jugar a todo un equipo, este
último lo podríamos comparar con Charlis Ortiz, delantero del Deportivo
Anzoátegui.
Jugador
experimentado del fútbol venezolano, ha visto la camiseta de Minervén, Real
Esppor, Deportivo Táchira, Deportivo La Guaira y ahora viste la aurirroja del
DANZ. Ortiz ha demostrado tener la suficiente madurez para afrontar cualquier
tipo de partidos.
Charlis
es un jugador muy polivalente, es delantero, también ha jugado de extremo,
quizás por eso es que demuestra tanta versatilidad en el terreno de juego,
posee todo, velocidad, buena pegada de larga distancia, definición exquisita,
buen juego aéreo para una disputa por el balón.
‘El
Tigre’ tiene esa cualidad, cuando sale jugando como delantero centro puede
encarar fácilmente a cualquier central y le puede ganar el uno contra uno al
igual que cuando le toca enfrentarse a un portero, en el 85% de sus
oportunidades sale victorioso en este tipo de enfrentamientos.
Cuando
le ha tocado jugar de extremo es más polivalente, se mueve más, es más rápido,
desborda, tira centros, jugadas diagonales que terminan en disparos al arco y
más beneficiado aún, cuando una jugada se traslada por la banda contraria a la
que él juega y el centro lo lanzan al segundo palo siempre llega él para
mandarla a guardar.
Aunque
las comparaciones son odiosas, a Charlis Ortiz lo podríamos comparar con Karim
Benzema, valga la redundancia de las ligas donde militan cada uno, aunque el
trabajo que hace Ortiz es parecido al del francés. Charlis, con 30 años y
pronto a cumplir los 31 es un delantero con todos los requisitos del fútbol
venezolano y con capacidad para militar afuera aún. Velocidad, potencia, buen
juego aéreo, exquisita definición, disparo de larga distancia y la madurez
necesaria para sacar lo necesario en el momento justo.
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