Rubén Guerrero A. (@RubenGuerreroA)
En un poblado al norte de Buenos Aires, en San Martín, nació Ismael Sosa
hace 28 años. El ahora desequilibrante jugador de Pumas de la UNAM, ha
encontrado cobijo en un conjunto histórico del futbol mexicano. El ‘Chuco’ pasó
años difíciles durante su infancia, pues la pobreza era parte del ella; sin
embargo, hoy, goza de un presente estable, gracias a su talento con la pelota:
“fue un tiempo complicado, teníamos el dinero justo para el día a día”, relata.
Ismael Sosa es un tipo plurifuncional. Lo mismo se desempeña como
volante por derecha, que se ubica detrás del centro delantero, como media
punta, donde mejores resultados ha obtenido, aunque también sabe lo que es ser
el responsable de los goles, como le ocurrió en la Universidad Católica de
Chile (2013), jugando como eje de ataque. “Lo que me gusta es sumar al equipo”,
comenta.
Pero este interior se formó en las inferiores de Independiente de
Avellaneda, donde rápido se ganó la confianza de sus entrenadores y despuntó
con miras a integrar las filas del rojo escuadrón estelar (hasta 2005). Solo
existía un problema. Antes que Sosa, debutó uno de sus compañeros de
generación, uno que atrajo todos los reflectores y que empañó el proceso de
varios otros, llamado Sergio Agüero y apodado ‘El Kun’.
“Agüero y yo jugábamos juntos, se hablaba mucho de los dos porque desde
las inferiores hacíamos goles, pero el ‘Kun’ se robó todas las atenciones y los
halagos. Ahora está hecho un crack en el Manchester City; a veces hablamos
todavía”, señaló Sosa a inicios del 2014, recién desempacado en México.
Y es que la inestabilidad y constantes cambios de aires que vivió a lo
largo de su carrera (pasó por cinco clubes en menos de 10 años), se han
detenido con su arribo en Pumas. El ‘18’ del cuadro auriazul es un inamovible en
el equipo que dirige Guillermo Vázquez, sumando cuatro torneos cortos hasta el
momento; 55 partidos de Liga y 15 goles, completan sus estadísticas.
Si bien no alcanzó las dimensiones de Agüero, Sosa, al igual que ‘El
Kun’, ha echado raíces lejos de la Argentina, en un sitio donde el futbol es
pasión y pan de cada día para los aficionados; moviéndose en el frente
ofensivo, como su compañero de inferiores, Ismael toma las riendas de su actual
escuadra. Las distancias son grandes entre México e Inglaterra, pero las
acortan historias y coincidencias como las de estos dos.
Publicar un comentario