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Gabriel López (@Gabriel_1021)


James Rodríguez llegó al Real Madrid, uno de los mejores clubes del mundo, luego de su excelente desempeño en la Copa del Mundo de Brasil 2014, en la cual resultó ser el goleador del torneo. Ese año venía de una temporada muy irregular en el AS Mónaco e incluso no era tomado en cuenta por Claudio Ranieri para su 11 titular. A pesar de ello, el jugador terminó la temporada con 10 goles y además, siendo el líder en asistencias de la Ligue 1 con 14.

La expectativa por su fichaje fue muy alta, debido al alto costo que pagó el equipo blanco por el “10” de la selección de Colombia (80 millones de Euros). Su primer partido como jugador blanco fue de titular ante el Sevilla, donde el club merengue se jugaba el primer trofeo del año: la Supercopa de Europa.

A pesar de tener solo días en el club, en ese partido pudo mostrar la calidad y todo su potencial. Tenía un reto muy duro y era el de suplir al argentino Ángel Di María como interior izquierdo. Ancelotti, quien era el DT en ese entonces, utilizó a James por la banda izquierda todo el año y el colombiano logró adaptarse a esa posición, a pesar de no ser su ubicación natural dentro del campo.

Su primer gol oficial con el Madrid lo anotó en otro partido en el cual se disputaba otro trofeo, frente al Atlético de Madrid en el minuto 81 luego de una jugada bastante fortuita para el colombiano. Esta nueva etapa para el crack nacido en Cúcuta, resultó bastante positiva y se convirtió en un jugador clave para la afición y en el esquema del Madrid de Ancelotti (4-3-3) jugando de interior. El mayor enemigo de Rodríguez fueron las constantes lesiones que frenaron su ritmo, pero aun así realizó 17 goles y 17 asistencias.

La temporada 2015/2016 sería el año de James… Eso titulaba la prensa madrileña como AS y Marca. Antes de iniciar el nuevo año con el Madrid tuvo que ir a Colombia a jugar la  Copa América de Chile 2015, en la cual se vio menos resolutivo y brillante que de costumbre, pero su juego habla por sí solo y seguía siendo clave para el equipo de Pekerman.

Por otra parte, en Madrid, llegaba el nuevo entrenador: Rafael Benítez. La plantilla en general hizo público su enfado con el presidente tras tomar esta decisión y rescindir el contrato de Carlo Ancelotti. La llegada del español marcaría un nuevo destino de James dentro del equipo.

El primer partido del Madrid oficial fue ante el Gijón por Liga BBVA y James partió del banco. Parecía extraño que le dieran descanso, ya que el jugador venía de unas vacaciones más largas de lo esperado, por su eliminación pronta en la Copa América. Luego de ello, tuvo problemas extradeportivos: supuestamente el jugador llegó de las vacaciones “pasado de peso”, según el cuerpo técnico blanco, encabezado por Benítez. El colombiano contestó a esta crítica por las redes sociales con una foto que dejaba ver su gran estado físico quitando de lado esta teoría de estar “pasado de peso”, y que por ello no jugaba.

De la noche a la mañana, pasó de ser indiscutible a un jugador de recambio más. Durante este tiempo apareció un jugador que, llegaba luego de su buena temporada y experiencia en el Oporto: Casemiro. El brasileño llegó y comenzó a ser ese eje en el medio del campo que le permitía a Toni Kroos y a Luca Modric poder liberarse de la parte defensiva y explotar lo que mejor hacen: la ofensiva.

El Madrid no tenía un juego claro ni tampoco identidad… el equipo que había creado Ancelotti ya no existía, aunque muchos de los jugadores eran los mismos. Luego de un semestre bastante agitado, Benítez fue cesanteado por la directiva blanca debido a los malos resultados… sobretodo el 0-4 en el Santiago Bernabéu ante su eterno rival.

James parecía renacer con este cambio de DT. La llegada de Zinadine Zidane al conjunto merengue significaba, a priori, cambiar el estilo de juego y trabajar mucho el manejo de pelota, ya que el francés en varias ruedas de prensa había afirmado que le gustaría que el equipo jugase como él lo hacía.



Zidane mostró la confianza al colombiano y le colocó varios partidos consecutivos como titular, cosa que con Benítez pasaba solo cuando faltaba alguno de la BBC. James se veía lento y no se contagiaba de sus compañeros, perdía balones de rutina y había perdido ese pase gol que había mostrado en su primer año con el equipo. Casemiro fue el sacrificado y dejó de ser importante en los primeros partidos con Zizou en el banquillo.

Cuando James estaba en campo, Kroos estaba obligado a hacer de Casemiro y preocuparse por la defensiva, más que por el ataque del equipo. Modric intentaba combinarse con el colombiano, pero éste no estaba en su mejor momento. Ante el Atlético de Madrid, James pierde una pelota en ataque y en el contragolpe Griezmann hace el 0-1 para darle la victoria a los colchoneros… ésta jugada desnudó las falencias defensivas de James y Zidane entendió que Casemiro era imprescindible en el esquema.

¿Qué pasa con James entonces? ¿Por qué con Ancelotti brilló con el 4-3-3 y con Benítez/Zidane no pudo hacer ni la mitad? El problema y la respuesta radican en que el jugador está consternado y se muestra apático y perdido en el campo. El Madrid mostró su peor versión con el colombiano en cancha como titular esta temporada y sin él, el equipo ha logrado entrar en una final de Champions y estuvo a punto de remontar una liga que veía muy lejos a 12 puntos del líder, pero que terminó reduciendo la diferencia y acabando a 1 punto a penas: en este repunte y buenos resultados, James no apareció nunca y no fue determinante para el equipo… esto último le dio la razón, por ahora, a Zidane en tenerlo banqueado.

Como se dijo anteriormente, la respuesta pasa por el tema psicológico del jugador. Él pasó de sentirse arropado por todos a estar abandonado dentro y fuera del campo, y esto no le permite jugar al fútbol como él sabe hacerlo. ¿Ha tenido buenos partidos? Sí, pero lo han colocado ante equipos débiles y en partidos de “menos importancia”, es decir, en las fechas de Liga BBVA previas o post partidos de Liga de Campeones simplemente para darle descanso a algún titular. Jesé y Lucas Vásquez probablemente no son mejores jugadores que James Rodríguez, pero cuando el DT ha necesitado de ellos le han cumplido y respondido dentro del campo.

En una entrevista hecha en “caliente” a James luego de haber jugado un gran partido con Colombia ante Ecuador en las eliminatorias al Mundial de Rusia, en el cual realizó una asistencia magistral a Bacca para el 1-0 afirmó que, cuando un jugador se siente querido y arropado por todos, las cosas salen bien. Estas palabras son claves para entender la situación del “10” del Madrid. En Colombia James brilla y es el mejor jugador por lejos cada vez que se pone la camiseta. Es clave e importante, y todo lo que aporta es vital para su equipo. Sin James Colombia no juega bien y pierde mucho en ataque.

En el Real Madrid el líder es Cristiano Ronaldo y se juega para él, mientras que en Colombia el líder es James y todo gira a su alrededor. En estos momentos James se ve perdido en la cancha y nada le sale. En varios vídeos subidos por las cuentas oficiales del club blanco, se ven los entrenamientos y las grandes jugadas y goles que hace… se le ve muy feliz y sonriente y además, comparte con sus compañeros, pero cuando entra al campo la situación da vuelta atrás.

La afición lo pitó en varias oportunidades, pero también lo aplaudieron cuando hizo las cosas bien. A los futbolistas de élite siempre se les pide dar el máximo y no basta con tener 10 partidos buenos en la temporada. Se avecina una final de Champions, pero como se han dado las cosas pareciere que James arrancará en el banquillo y quién sabe si tendrá algunos minutos. Ojalá, por el bien del jugador, al finalizar la temporada pueda solucionar sus problemas personales y tenga la oportunidad de trascender nuevamente en el Real Madrid o por el contrario hacerlo en algún otro equipo top de Europa. 

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