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Roy Galdos (@chinodelarisa)
Desde que se publicó la suspensión provisional de 30 días a Paolo Guerrero por parte de la Comisión Disciplinaria de la FIFA, se ha hablado mucho del tema, y sin embargo se ha dicho muy poco. A excepción de algunas voces más sensatas. El ambiente se tornó más turbio que de costumbre al tratarse de una situación atípica, sobre todo en la instancia en la que se presenta.

Con el partido ante Nueva Zelanda mirándonos de reojo, y ya con la selección peruana instalada en Auckland, queda observar el panorama desde otra óptica. Las condiciones para afrontar el duelo con la ausencia confirmada de Paolo Guerrero obviamente no son las mismas.

Más que un goleador
Significa para la selección peruana más que un arma para anotar. Desde que asume el liderazgo del equipo, su presencia ha servido para que jugadores como Edison Flores, Christian Cueva, André Carrillo y Yoshimar Yotún se potencien en favor del colectivo. Individualmente cada futbolista que rodea a Guerrero crece. Los movimientos del delantero del Flamengo, en su mayoría, están orientados a distraer y fijar al rival. De ese modo, la llegada de los mediocampistas ofensivos es más sorpresiva y efectiva.

Otro dato muy importante es que Paolo Guerrero, durante toda la Eliminatoria, ha sido el jugador peruano que más pases ha recibido. Es decir, como apoyo en distintas zonas del campo, su presencia ha significado un alivio para darle continuidad al juego.

Menos variantes, mayor versatilidad
Los balones largos y precisos de Miguel Trauco o Yoshimar Yotún a Paolo Guerrero son, ante la dureza del rival para penetrar su defensa, una variante muy utilizada por la selección Peruana. Ante Nueva Zelanda, sin embargo, no va a ser así.

Tommy Smith (1,88 m) y Winston Reid (1,91 m), probables defensores titulares ante Perú, bordean y superan con facilidad el metro noventa. Con jugadores de esa estatura en la última línea neozelandesa, y sin Guerrero, esa variante va a tener que ser desechada. O quizás utilizarla en contadas ocasiones – cuando el equipo tenga superioridad numérica para ganar los segundos balones -.

El reemplazante de Paolo va a tener la suficiente movilidad por dentro y fuera del área para desestabilizar a los espigados defensores oceánicos. Con una variante menos ante una selección que se repliega en demasía en determinadas ocasiones, le va a exigir a los de Gareca una mayor versatilidad y flexibilidad en ataque.

Un defensor menos
Paolo Guerrero, con 1.85 m de estatura, cumplió con creces las labores defensivas en área rojiblanca. Ya sea marcado en zonas, individualmente o en el vértice del área, siempre aportó para despejar cualquier aproximación del rival desde el balón detenido.

Con Alberto Rodríguez, Christian Ramos y Renato Tapia, tres de los jugadores más altos de la selección peruana, podría no bastar ante la cantidad de balones aéreos que demandará enfrentar a Nueva Zelanda. Los de Anthony Hudson seguramente sacarán provecho de eso.

¿Golpe anímico?
La pérdida de un jugador de su categoría y significancia duele; pero a la vez fortalece. Los jugadores que van a afrontar este reto ante Nueva Zelanda son conscientes de que ahora tienen un motivo más para conseguir la clasificación.

La selección de Ricardo Gareca ha demostrado que se potencia y crece en la adversidad. Las piedras, mientras más grandes y pesadas, no son un problema para un equipo que se ha mostrado sólido emocionalmente en situaciones de mucha complejidad.

Cabeza fría, hay equipo
Anteriormente ya hubo ausencias que en un principio parecían no tener solución. Sin embargo, ‘El Tigre’ lograría lidiar con ello y sacar adelante los partidos. En ese universo de jugadores que armaría tras la Copa América Centenario hallaría respuestas que estuvieron a la altura de las dudas. Esta es una prueba más para él y su equipo, lo que obviamente ha dejado de ser un problema para convertirse en un impulso.
Asimismo, el segundo capitán del equipo, Alberto Rodríguez, dejó líneas que tiñen con claridad el cuerpo del equipo: “No hay nadie imprescindible en el fútbol”.

Cartas sobre la mesa: Ruidíaz, Farfán y Reyna
Ricardo Gareca siempre ha sido consecuente con una cosa: si el titular no está, el reemplazante va a ser su primer suplente. En ese aspecto, Raúl Ruidíaz parte con ventaja, como contra Bolivia en Lima que entra para reemplazar a Guerrero.
Después de Guerrero, ‘La Pulga’ es quién más conoce esa posición. En algunas ocasiones terminó acompañando a Paolo en la delantera, pero siempre terminó ocupando la posición de centrodelantero. A su favor, además, está su constancia en México: su buen nivel en suelo azteca con el Monarcas Morelia no es de ahora. Esta temporada ya suma 8 anotaciones.
Tras Ruidíaz está Jefferson Farfán, quien llega al repechaje con la puntería bien afinada. En Rusia, Yuri Semin lo viene usando de centrodelantero y ‘La Foquita’ ha respondido con goles. La duda estaría en la cabeza de Gareca. Para el técnico argentino Farfán le sirve más por la banda, tal como lo hizo ante Bolivia (por izquierda) y Argentina (por derecha).
Por último, el recién convocado – precisamente por la suspensión de Paolo – Yordy Reyna también está en la lista de posibles reemplazantes. En el Vanconver Whitecaps de la MLS marcó 6 goles en los 21 partidos que disputó.  En el 1-1 ante Colombia ingresó pero para jugar por la banda izquierda en el 4-3-3 que planteó Gareca. De ese modo, de los tres, es quien menos opciones tiene de arrancar. Sin embargo eso no quita que sea una variante dependiendo del andar del partido.

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